Arturo Martí: 25 años de compromiso con las Olimpiadas de Física.
Uruguay participó en la primera Olimpíada Iberoamericana de Física (OIbF), realizada en Colombia en 1991. Sin embargo, fue a partir del año 2000 que la presencia de nuestro país se volvió permanente en los eventos anuales. Desde entonces, un nombre sobresale y se asocia, más que ningún otro, con el esfuerzo y la continuidad de esta participación: el del Dr. Arturo Martí.
Desde hace veinticinco años, el Dr. Martí ha desempeñado un papel decisivo en la organización y consolidación de las Olimpiadas de Física del Uruguay (OFU), así como en su proyección internacional. Bajo su coordinación, las olimpiadas nacionales alcanzaron un nivel sostenido de desarrollo académico y de articulación institucional, integrando a docentes, estudiantes y autoridades educativas en torno a un mismo propósito: estimular el estudio de la física y fomentar jóvenes talentos científicos.
Su labor ha abarcado la elaboración y revisión de pruebas teóricas y experimentales, la organización de actividades de difusión para docentes y estudiantes, y la formación de equipos de trabajo que han garantizado la continuidad del proyecto a lo largo de más de dos décadas. Ha promovido, además, una red de colaboración entre la Sociedad Uruguaya de Física, los institutos de física de facultades públicas y privadas, la Asociación de Profesores de Física del Uruguay (APFU) y las inspecciones de física de Secundaria y UTU, fortaleciendo los vínculos entre el ámbito académico y el sistema educativo.
A nivel internacional, su compromiso se refleja en la continua participación de destacados estudiantes uruguayos en la OIbF, en haber representado a Uruguay en múltiples ocasiones, y en haber liderado la organización de dos ediciones de esta competencia que, como país sede, colocaron a Uruguay en lo más alto: la X OIbF (2005, Colonia del Sacramento) y la XXI OIbF (2016, Carmelo), quedando ambos eventos en la mejor memoria de la comunidad iberoamericana de física. En ambas oportunidades, su liderazgo técnico y humano permitió articular con éxito a las delegaciones participantes, asegurar la calidad de las pruebas y proyectar una imagen de Uruguay como sede confiable y de alto nivel académico dentro de la región.
La constancia del Dr. Martí al frente de las Olimpíadas de Física del Uruguay es, sin duda, uno de los ejemplos más notables de dedicación sostenida a la extensión universitaria con el propósito de motivar el interés temprano por la ciencia a través del estimulante desafío intelectual que proponen las olimpiadas. Su trabajo ha inspirado a varias generaciones de estudiantes y docentes, contribuyendo a la difusión de la cultura científica y al fortalecimiento del espíritu de cooperación entre los países de la región.
Gracias, Arturo!
